En algún día no muy lejano ni muy cercano de el ahora la tarde era lluviosa y fría, más fría que las noches en invierno, el aire soplaba que calaba hasta lo huesos, las ramas de los arboles se agitaban estridentemente, la gente corría de un lado a otro tratando de esconderse de la lluvia, temblaban de frio, sus cabellos escurrían de agua sin embargo un hombre, no parecía muy joven pero tampoco aparentaba cuarenta años mostraba indiferencia a tan estrepitoso clima, sus ojos parecían profundos pero no decían nada, era una mirada perdida, mirando la nada, no enfocaba nada hasta que de pronto su mirada y la mia se cruzaron, mi corazón latía fuerte y rápido, estaba por salirse de mi pecho y por un momento no pensé en nada pero sonreí, el desvió la mirada y la dirigió hacia el cielo y parecía enunciar algunas palabras, la lluvia cada vez más aumentaba, parecían caer cubetas de agua, mi mente se cerro y decidí contemplarla debajo de un pequeño techo de una casa, me deje caer en los escalones que se encontraban fuera de la puerta y recargué mi barbilla en mis rodillas, mis ojos bailaban en las gotas de agua que se hundían en los pequeños charcos, poco a poco dejaron de sonar los pasos en la lluvia y no había ruido alguno, solo el caer del diluvio, mis manos estaban entumecidas y la espalda me mataba pero algo me obligó a quedarme ahí en seguida aquel hombre se acerco a mi cruzando la calle, sin ninguna prisa, no aparentaba importarle el quedar empapado , caminaba con las manos en los bolsillos y observaba sus zapatos negros —¿Parece no preocuparse por mojarse?- le dije sin verle a la cara —Claro sin embargo no puedo cesar la lluvia, ni tampoco evitar mojarme sería ilógico hacer algo que terminará siendo en vano— Deje salir un suspiro y un breve silencio abarco minutos, tal vez horas el tiempo no importó —A veces siento que la lluvia alivia todos los males, es como ducharte, limpias tu cuerpo tu alma y cuando lloras ella esta ahí para esconder tus lagrimas— sacó algo de su bolsillo y se lo llevo a la boca
—¿Por qué habríamos de llorar en la lluvia?—pregunté
—No lo sé, algunas personas la lluvia los conmueve y a otras les causa muchas otras emociones, yo ya olvidé distinguir la alegría o la tristeza, ya no importa que sea lo que la gente demuestre yo olvide como distinguirlas—
—tal vez alguna situación hizo que lo olvidaras, los jóvenes se esconden de las emociones, de los sentimientos, del amor …—su semblante cambio, palideció de un momento a otro y se escuchaba agitado —¿Amor? Es un tema muy complicado para una niña de corta edad, ¿no lo crees?—
—Claro que lo es, abarca desde la sístole, la diástole hasta las extrasístoles y la muerte de un tejido, técnicamente hablando…—
—Olvida el palpitar del corazón, el sistema circulatorio y aquellas cosas que te muestran en la escuela, analízalo, piensa en todo lo que puede significarse el amor—
—Parece ser que te fascina el hablar de ello, eso solo significa una cosa, estas enamorado y es un amor impresionante…
Echó una carcajada, se mordió la mano y se sentó a mi lado —Te equivocas—dijo casi susurrando—Tengo gran desprecio por el amor que no quiero ni recordar el cómo se siente en el corazón, en el vientre, en mi cabeza… Hace guerras dentro de mi poniendo en desacuerdo a cada uno de mis sentidos… Me hace sentir tan bien en ocasiones y en otras me pone en disputa conmigo mismo a causa de mis intenciones… Amo al amor, amo todo lo que hace sin embargo cuando se va, lo odio tanto… Sólo pienso en jamás haberlo sentido… No estoy en espera de nada solo el olvidar que existe, que este sea ajeno a mi vida tan inalcanzable como el espacio … No necesito amor, no quiero amor, ni tampoco amar… No lo exijo, no lo quiero, pero en algún momento mi mala suerte me saludará y me dirá “enamórate de nuevo mira que es placentero, es todo tuyo, disfrútalo”… Claro está que odiaré a mayor magnitud a mi mala suerte pero puede que mi suerte responda a mi auxilio y me salve de tal… Que no lo creo, llegará tarde porque siempre lo hace, no le importa y hace que se vaya para luego quedarme de igual manera de la que estaba - ….
Continuará en otra circunstancia en el que este escritor se anime de nuevo a escribir algo que haga que aquel hombre ame de nuevo ....
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